Tipos de plantas ornamentales.
Planta ornamental:
Una planta ornamental es aquella que
se cultiva y se comercializa con propósitos decorativos por sus características
estéticas, como las flores, hojas, perfume, la peculiaridad de su follaje,
frutos o tallos en jardines y diseños
paisajísticos, como planta de
interior o para flor cortada. Su cultivo, llamado floricultura, forma una parte fundamental de la horticultura.
Por sus dotes estéticos embellecen cualquier
espacio y en la actualidad más de 3000 plantas son consideradas ornamentales.
Sus tipos son:
- Árboles (y arbustos): Son un
elemento muy importante de impacto visual en nuestro jardín. Aportan altura y
estructura, ya que alrededor de los mismos se pueden colocar el resto de
elementos variables del jardín. Hay muchas clases de árbol decorativo. Además,
algunos árboles frutales son considerados ornamentales también, a parte del
valor de su fruto (como el manzano silvestre). La diferencia con los arbustos
suele ser que el árbol tiene un solo tronco y, en el caso de los arbustos, se
va ramificando desde la base.
·
Coníferas como el cedro, el pino; de hoja persistente como
la encina o caducifolios como el tilo, Ginkgo biloba, Cotoneaster,
rododendro.
·
Ciertos árboles, como el naranjo, cerezo o almendro entre otros,
cultivados para uso alimentario también pueden plantarse como ornamentales
cuando se utilizan en jardines o como decoración urbana, por su vistosidad en
periodo de floración, porte o follaje.
- Acuáticas: Si tienes espacio en el jardín puedes hacer un
estanque o simplemente poner una pecera con unos peces y unas flores de
agua decorativas. Son perfectas para decorar tanto en interior como en
exterior.
Las plantas acuáticas las puedes encontrar en la misma
naturaleza: en los canales, estanques o paneles a lo largo de las orillas de
los lagos, ríos, etc. También puedes hallar algunos lirios blancos, las reinas
de las aguas de pantanos.
Las especies acuáticas ornamentales, sin embargo, son más exóticas
- Nenúfares: Entre los que se
encuentran el loto y el irupé, helecho acuático,
lentejas de agua.
- Anuales: La
particularidad de este tipo de plantas es que hacen todo su recorrido en el
periodo de un año, es decir, germinan, florecen y se marchitan en este tiempo.
Son muy recurridas para aportar dosis de colores llamativos a las
estancias.
Definiéndolas, las plantas
anuales o, más comúnmente llamadas plantas de temporada, son aquellas plantas herbáceas (o sea,
que no son leñosas, como lo son árboles y arbustos) que tienen una vida de unos cuantos meses.
Cuando llegan los fríos o cuando se pasa la floración se sacan de la tierra y
se tiran.
Ejemplos: Petunia, albahaca, Impatiens, etc.
-Helechos: Muy usado como
planta de exterior por su resistencia y sus dotes de adorno en macetas
colgantes sobre todo. Aunque no tiene flores se han hecho muy populares por su
gran follaje. Además, hay una gran variedad.
Por otra parte, disponen de un follaje
tan llamativo que son ampliamente aplicadas en la realización de
arreglos florales. También hallamos especies indicadas para
pequeños jardines exteriores.
Su enorme resistencia convierte al Helecho en una planta con gran capacidad de adaptación.
Su enorme resistencia convierte al Helecho en una planta con gran capacidad de adaptación.
- Trepadoras: Hay
para todos los gustos. Por un lado, están las que tienen flores. Las opciones
dentro de las flores son muy variadas, pueden ser coloridas o blancas. Por otro
lado, están las que no tienen flor. Estas tienen hojas de distintos tamaños y
formas, además, las tonalidades de su verde van desde muy claro hasta verde
oscuro, pasando por otros tonos como rojizo, etcétera.
Las trepadoras según van creciendo se van enroscando a una
superficie para ir desarrollándose de forma vertical y tener mejor acceso a la
luz y de esa forma poder realizar la fotosíntesis.
Aunque la incorporación de plantas trepadores aporta muchos
beneficios, debemos tener en cuenta que éstas pueden ser más susceptibles que
otro tipo de plantas a sufrir daños causados por fuertes vientos.
Ejemplos:
Hiedra, pasionaria, helecho trepador japonés.
- Palmeras: Altas, bajas, con un tronco fino, grueso,
varios... hay todo un abanico de posibilidades y dentro de él puedes escoger la
que más te convenga y favorezca a tu jardín o zona interior. Se pueden dividir
en de origen desértico o de origen tropical y subtropical. Las primeras son las
que mejor se adaptan.
Todas las de la familia Arecaceae, como Phoenix, Washingtonia, Roystonea, etc. Sin embargo también
son incluidas pseudo-palmas como las cícadas (por ejemplo Cycas revoluta) y la palma del viajero.
- Tuberosas y bulbosas: Su peculiaridad es que tienen un órgano de reserva de
alimentos subterráneo. Su cultivo tiene dos posibles objetivos: para formar
macizos ornamentales o para coger sus flores, ya que algunos tipos lucen más en
ramos y floreros.
Las bulbosas y tuberosas
cumplen dos funciones en un jardín: se cultivan para recoger sus flores y para
formar macizos ornamentales.
Ejemplos:
Narcisos. gladiolos, dalias y jacintos.
- Céspedes: Junto con las hierbas son un recurso que no debemos
subestimar en nuestros jardines. Se puede jugar con diferentes tonos y
texturas, así como colores y formas. La distribución del césped también cuenta
para el sentido estético del espacio. Le podemos añadir un camino de piedra para un acabado más completo.
El diseño es importante a
la hora de conseguir una practicidad de la zona con césped. No deberíamos
incluir zonas estrechas o de difícil acceso con césped en el jardín, y quizás
deberíamos situar a estas superficies encespadas cerca de la casa o en un lugar
para utilizar. También podemos separar el césped de los demás elementos del
jardín con el objetivo de independizar su riego.
Ejemplos:
Especies de pasto poáceo.